Elogio de la ambulancia

Paseaba yo esta tarde por las calles de mi ciudad. A pesar del tráfico y de la gente que apresurada se dirigía a ninguna parte, iba yo ensimismado, escuchando música, no recuerdo qué.De pronto ,un sonido estridente ha acaparado mi atención.Todas las cabezas convergían en un mismo punto.Era una ambulancia que veloz se abría paso entre los coches.Estos se apartaban sin dudarlo para dejarla pasar.Aun con el ruido de la sirena, la calle se ha quedado en silencio. Las conversaciones han cesado y yo he apagado la música.Todos hemos seguido con la mirada la estela de la luz de la ambulancia que a trompicones se alejaba de nosotros.Durante unos segundos,todas nuestras mentes han estado conectadas. Nadie ha dicho nada, no hacía falta.Todos hemos pensado en la persona a la que la ambulancia iba a socorrer.Nos hemos olvidado de nosotros y, sin palabras, hemos comprendido, hemos sentido la fragilidad de la existencia.Los coches que sin dudar se apartaban y abrían camino a la emergencia, la gente que olvidaba sus quehaceres,la compasión que allí nacía, el pensar en otros por un instante, el olvidarnos de nuestros egoistas pesares, el respeto ante la ayuda que se ofrece, la desinteresada mano que se extiende han hecho posible un minuto al menos de lo que el ser humano lleva dentro y no sabe.La fotografía de ese instante, el tiempo congelado en el que todos eramos el pobre herido, el hombre atropellado o la mujer maltratada dicen más de nuestras capacidades que todas las palabras pronunciadas.Un poquito después, pasado ya el silencio y con el ruido otra vez en nuestras venas hemos vuelto a caminar, a pensar en la salida del colegio o en el pan para la cena.

Qué poco dura nuestra entrega, qué fácilmente olvidamos, qué solos nos quedamos cuando pasamos del  corazón a nuestros asuntos.Vivimos aturdidos.Sabemos lo que debemos hacer y no lo hacemos.La anestesia general que la prisa nos provoca, hace que olvidemos que la vida es un instante que nunca recuperaremos.

La ambulancia representa a nuestra conciencia que con su sirena nos recuerda que vivimos en estado de emergencia, que debemos levantar la vista y fijarla en ese punto concreto donde no hay duda y todo es esperanza. La gente que nos rodea somos nosotros vistos desde fuera. El coche que se aparta, la decisión sin duda y la estela de la luz de la sirena, el camino de nuestro destino.

Qué fuerza oponemos a lo que de verdad nos importa. Qué tesón en hacer cosas inútiles. Qué pasión por disfrazar el tiempo con la prisa. Qué oscuro placer obtenemos de vivir para quejarnos. Qué consuelo más estéril el del destino adjudicado.Con qué indiferencia matamos el tiempo.

Cuando pasa la ambulancia comprendemos que ya no es momento para dudas, que se ha de hacer lo que debe hacerse y que lo que tenemos de nada sirve si lo ocultamos. Cuando suena la sirena despierta la conciencia, la palabra no llega a la boca y sin emitir sonido alguno ya sabemos el significado de esas palabras truncadas.Tiempo es de detenernos y decidir lo que de verdad importa. Dejémosnos de preocupar por insignificancias despreciables.El tiempo no lo hemos inventado para perderlo.La vida no puede ser una corbata, ni el pan para hoy y hambre para mañana.

La ambulancia no siempre llega a tiempo. No hay nada más absurdo que una sirena que se abre paso para llegar irremediablemente tarde.

7 comentarios

  1. Pingback: Trackback
  2. Hay gente que pasa su vida entre paredes y túneles, entre bloqueos mentales y negaciones sistemáticas. Gente que pasa por el mundo sin haberse dado a ser uno con lo maravilloso, con el milagro radiante que emerge del cosmos. Gente que se muere sin haber vivido. Entonces, es importante encontrar la razón que se muestra abiertamente en todo el mundo natural, la razón de la existencia. Hay una razón para vivir, hay una importancia mucho más grande en un ser que vive y camina por estos suelos, porque la vida se manifiesta milagrosamente en cada uno de sus seres…. tambien en cada ser humano.
    No nos dejemos vencer por un cúmulo de ideas negativas, porque la naturaleza en su sabiduría ha puesto en cada uno la capacidad de realizar todo aquello que pueda imaginar, si te imaginas enfermo, lo estarás, si te imaginas solo, lo estarás, si te imaginas separado de todo cuanto existe, lo estarás. Imagina un mundo hecho a la medida del milagro y los milagros florecerán en todas partes. Navega en tus océanos internos y descubre nuevos continentes en el alma, descubre a Dios en cada una de tus células, descubrete a ti mismo y la vida será la luz, y la vida te iluminará, y en cada gesto, en cada mirada, algo bueno llegará a ti.
    Un abrazo, querido Jusamawi, y que disfrutes de un domingo sereno.

  3. Amén.
    Gracias por tu suculento comentario.Después de leerlo haré la digestión pensando en él.Lo leeré asímismo todos los días al levantarme.Ya te contaré si funciona.

    Un abrazo

  4. Afortunadamente, no todo el mundo está tan dormido, o en-sí-mismado o intro-vertido como para que sea necesaria una sirena para despertarlos, aunque sea momentáneamente. Aquellos que sí lo estaban, retornarán a su sopor, sin duda, tras su paso. Pero los que no, continuarán arremangados, haciendo lo que tienen que hacer. Son quienes nunca llegaron realmente a rendirse ante los encantos de Morfeo.

  5. Odio los despertadores, las sirenas y todos los ruidos estridentes.Cumplen una función, pero no es natural.Quien necesita ser despertado merece seguir dormido.

    «Recuerde el alma dormida,
    avive el seso y despierte
    contemplando
    cómo se pasa la vida,
    cómo se viene la muerte
    tan callando…»

  6. Hola:
    He encontrado este blog y me parece muy bueno, parece que coincidimos con los gustos musicales, de literatura y de filosofía de vida. No hay casualidades.
    Sigo investigando y me encunetro con la ambulancia.
    Soy médico de una unidad de emergencias, y voy dentro, con mis ansiedades y mis ganas de ayudar. A veces la gente me dice que veré » muchas cosas», que como puedo trabajar ahí…pero , que suerte, cuantas personas que sufren son atendidas y lo más rápido posible.
    Hace sólo dos días saqué a un chico aprisionado en un accidente de tráfico, estaba roto, con un dolor que sólo se puede comprender viéndolo, una mágica inyección y todo desapareció, en 5 minutos un hospital cercano le ofreció la diferencia entre la vida o la muerte. Está vez ha ganado la vida.He sido partícipe de ello, mi trabajo, mi esfuerzo y mi actitud han sido determinantes.Esa sirena que suena es un canto a la vida.

  7. Buenas noches Menisco,

    Encantado de verte por aquí. Gracias por tu comentario.Que las cosas sucedan por causalidad o casualidad es un tema tremendamente interesante. Lo malo es que todos tenemos pruebas para demostrar ambas cosas.
    Lo que cuentas de tu trabajo es reconfortante y no cabe duda de que la sirena no suena por casualidad.

    Espero verte por aquí. La puerta está abierta.

Deja un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: