Todo lo queremos medir. No paramos de inventar magnitudes que nos permitan cuantificar y explicar lo que sucede. Hemos recorrido 20 kilómetros, han pasado dos horas, estamos a 26 grados, el producto interior bruto es de 160 billones de euros. Así hasta el infinito. Estas magnitudes nos permiten transmitir información. En el mejor de los casos ayudan a comunicarnos. No siempre, ya que la barrera entre lo objetivo y subjetivo es muchas veces infranqueable.
El concepto que ha determinado el desarrollo humano, el que más empeñados estamos en medir y cuantificar es el concepto de tiempo. Con él surge la duración y con ella la conciencia.
Es imposible comprender el tiempo. La idea de algo que nunca empezó y nunca terminará escapa a nuestras pobres entendederas. A pesar de ello hemos imaginado el tiempo como una línea infinita que no tiene principio ni fin. En otra versión, para tratar de agarrar con las manos lo que se nos escapa, hemos abandonado la línea recta y la hemos transformado en un círculo. Pensamos así que no hay principio ni final, que todo vuelve a suceder. La idea del círculo es cerrada, todo vuelve a empezar. Es el mito del eterno retorno. Un círculo es cerrado, todo es principio y fin. Tiempo lineal o tiempo circular. Lo acabo de expresar. ¿Alguien lo entiende?
Tener conciencia de que el tiempo pasa es tener conciencia de que existimos, de que somos y, trágicamente, de que tenemos un principio y un final. Bergson se negaba a aceptar el tiempo como una recta que viene desde el infinito y va hacia el infinito. Si esto fuera así ya todo habría sucedido. Si algo nunca empezó, ¿cómo hemos llegado hasta aquí?
La conclusión lógica es que es un error plantearse el tiempo espacialmente. El tiempo no es ni línea recta ni es un círculo. Todo lo más es una percepción de que las cosas ocurren, de que los objetos se mueven. Bergson por eso no habla de tiempo sino de duración. Quien no tiene la capacidad de captar la duración de los fenómenos no puede tener conciencia. La conciencia existe gracias a la duración. La conciencia surge en el momento en el que percibimos que nuestra vida tiene un principio y un final. Nacer y morir, una vez más, se muestran como elementos indisociables de la conciencia. Somos porque nuestra vida dura.
Infinito y eternidad, espacio y tiempo. En ellos nos movemos pero siguen siendo conceptos oscuros, inabordables, inabarcables. Para tratar de comunicarnos los reducimos a magnitudes primarias que nos permiten atravesar el día a día. Horas, minutos, días y años. Hablamos de ayer y de mañana. Son simples trucos con los que apañamos la posibilidad de ser conscientes.
Lo único sensato es reconocer que el tiempo se nos escapa. Lo real, lo que dota de sentido a lo que que hacemos es que dura. Dios,en su infinitud, no comienza y no termina. No puede, por tanto describirse como consciencia. La vida eterna, no nos engañemos, no es más que un infinito instante sin tiempo, sin duración. En ella seríamos como piedras inconscientes.
Quien contempla esta vida, la que conocemos, la que tiene duración, como dolor y como valle de lágrimas sueña con esa eternidad, en la que seremos todo, en la que todo es simultáneo. Parece no saber que en esa vida no habrá conciencia. El yo dura. En la eternidad el yo se disuelve en la nada..
En la línea infinita no somos. Intuimos nuestra existencia porque duramos.
El tiempo no es más que una entelequia, algo de lo que no podemos decir nada. Nos hemos de conformar con el puro devenir, con el principio y fin. Con esto no dotamos de sentido a nuestras vidas, simplemente nos permite saber que estamos vivos.
¿Por qué somos capaces de concebir cosas que no podemos entender?
El tiempo pasa. ¿Qué significa esta afirmación? Nada. Nacemos y morimos. A partir de ahí nos empeñamos en buscar sentido. Noble intento.
En un tiempo y espacio infinitos, ¿qué rayos pinta el sentido? Sin pasado, presente ni futuro ¿existe el momento presente?
En el infinito nada sucede, todo es quietud, no hay movimiento.
Cuando nos despertamos por la mañana, existimos porque somos conscientes de que ya no es ayer. Siempre es hoy, siempre es ahora. Mientras dure.
Concebimos la felicidad como un momento pleno que nunca termina. No es más que un sueño, eso nos mataría. Lo que nunca termina no existe.
Muy cercano a la filosofía «dura» en tus últimos artículos. Muy abstracto, quiero decir.
Wow! Me gusta mucho esta entrada (también me gustan las que hay que leer 2 o 3 veces antes de escribir algo).
A Bergson sólo lo conozco por referencia de LRH… por aquello del élan vital, ya sabes. A él le interesó muchísimo ese concepto y empezó a buscarlo, algo así como el Santo Grial. A raíz de esta búsqueda surgió Dianética: encontró el mecanismo de la memoria celular y cómo esa memoria determinaba el potencial de supervivencia del organismo en cuestión, incluyendo al Homo Sapiens. : – ) Esta fue la base de todo lo demás, cuando pudo desentrañar por completo la «anatomía» del impulso de la vida en sí, sus cualidades y su superioridad sobre la materia (que es lo que ahora llamamos «Theta»), pero en una forma muy diferente a como se plantea por ejemplo en el hinduísmo, como una especie de negación o rechazo a lo material per se…. en fin. Es interesante seguir las líneas de investigación y descubrimiento desde los orígenes.
Tienes razón en que es «imposible comprender» el tiempo, al menos como se lo plantea. Y en general es un tema tremendamente confuso, por lo que intuyo que su solución debe ser algo tremendamente simple. Es tan confuso que la gente tiende inevitablemente a referirse a él con categorías espaciales: «un largo tiempo», un tiempo «muy breve», etc. Y como muy bien dices, no se puede ver de esa manera, si se aspira a entenderlo.
Yo he aprendido que lo que no se puede comprender luego de un estudio razonable es porque contiene una o varias mentiras. O ilógica. O irracionalidad. Términos parecidos, pero no idénticos. Y estoy segura de que pasa eso con el tiempo. No hay duda de que el presente existe. Nadie en su sano juicio tiene problemas para comprender el concepto de «tiempo presente». La palabra preferida de cualquier niño: «¡Lo quiero ahora!!!» Para ellos es impensable la idea de otro tiempo diferente al presente. (Yo considero a los niños en general mucho más lógicos que a los adultos, tú no, pero sólo porque tienes la idea fija de «una sola vida» y que, por tanto, nacen «en blanco»). ¿Pasado? Es difícil de entender, especialmente cuando uno ya dejó atrás la adolescencia…. ¿Quién podría convecernos que nuestras hijas no nacieron la semana pasada? ¡¡¡O ayer!!! ¿Y que hace uno o dos años aún estudiábamos en la Universidad? ¡No sé a ti, pero a mí nadie podría! ¿Futuro? Explícaselo a Jade… ¡Ja! Te deseo suerte. Explícaselo a una mujer enamorada, que verá a su amor dentro de una semana, un mes… o en una próxima vida. ¡Imposible de comprender!
Aunque no entendí bien de qué manera relacionas la conciencia con la «duración», por lo que en principio no estoy de acuerdo, sí pienso que ante algo inconmensurable es clave la capacidad de dividirlo en partes, para poder comprenderlo o confrontarlo mejor. Desde ese punto de vista, sí existe el CAMBIO. El cambio podemos percibirlo claramente y en base a eso determinamos lo que llamamos «tiempo». Supongo que esto se relaciona con la duración que tú mencionas: Te vas de viaje por 10 años y cuando regresas, tu ciudad tiene un Metro que antes no tenía, han derribado muchos árboles y han plantado otros que ahora son jóvenes; la casa vecina es ahora un condominio…. han pasado 10 años. Te vas por 10 horas y sucede todo eso, y el resultado es que enloqueces. Es simple. Salen unas cuantas novelas de esa idea.
De ahí es que viene el concepto de «ciclo de acción»: algo comienza, experimenta determinados cambios de posición en el espacio, en su composición material y de energía y termina. Es lo que produce «tiempo». Si no termina nunca, o no cambia, o no comienza, no hay tiempo: el tiempo «se detiene» como en un pueblo fantasma…. La ecuación sería algo así como «a mayor cantidad y magnitud de cambio, más tiempo». O, de manera más pragmática y cotidiana: ¿No tienes tiempo para nada? ¡Termina tus ciclos de acción inconclusos! 😉
Edgar,
Debe de ser que estando de vacaciones tengo demasiado tiempo.Quiero ser concreto pero no sé como lo hago siempre acabo divagando.
Saludos
M,
Gracias.
El impulso vital de Bergson es el que hace que la vida siempre se abra paso creando, innovando, inventando.
El tiempo detenido es una imagen poética preciosa.El tiempo y la realidad son algo continuos.No podemos desfragmentarlos.El tiempo se nos escapa de las manos.Lo que nos hace conscientes es darnos cuenta de que algo dura.Cuando intuimos que algo empieza y acaba estamos hablando de duración, no de tiempo.Esa intuición es la que nos permite ser conscientes.El mundo dura, la vida dura, mi vida dura.
¿Cómo va a entender Jade el futuro si lo tiene que hacer ella?
Me encantaría tener una visión Unamunezca del tiempo. Comprender lúcidamente que «la existencia precede a la esencia» o que «los momentos del tiempo son manifestaciones de la temporalidad» pero no: Estoy hosca, tosca y aturdida. Hoy veo al tiempo en un sentido mucho más figurado, y, cuando digo hoy, es hoy, no el sentido existencialista del presente. Hoy pra mí el tiempo es un Scania que me chocó de frente: y lo peor es que me ha dejado viva para reflexionar al respecto.
El viernes cociné seis docenas de empanadas de carne, cinco de triángulos de cebolla y queso, ocho de envoltinis de salchicha, cuatro piononos de queso azul, más de ciento cincuenta canapés, y tres tortas con adornos y velitas de colores.- era el cumpleaños de mi hija- Agotada, caí en mi cama, y con un golpe en la frente me di cuenta de que me convertí en una máquina de alimentar personas, y no pasiones.
Me pregunté donde estaba ese novio con pelos largos de los catorce, ese traje de baño diminuto de los veinte, y esa obsesión permanente por discutir lo indiscutible. Dónde quedaron mis ganas de escribir un libro y dedicarselo a mi padre -ahora no tendría sentido, olvidó sus gafas cuando partió- y de cuestionar el rol de la generación Barbie – mis hijas ya tienen varias cada una-.
Ya preocupada por mi destino, mi pequeña Lola, a la que todavía se le entiende muy poco, subida a cocochito -léase sobre mis hombros- comenzó a apuntar con sus deditos mi cabello diciendo: un peíto banco ma! a medida que descubría canas en mi interminable cabellera.
Yo entiendo lo inexorable, lo inapelable, lo ineludible, pero… ¿Cuándo sucedió?
Discúlpame J, discúlpeme Jean Paul, Hoy no puedo comprender aquello de que «el pasado es inconsciente y, por lo tanto, incogniscible» tampoco quiero, solo por hoy.
También he decidido ir a la peluquería.
No sé cuánto y a quién le gustan,entretienen o sirven mis comentarios, pero hoy me sirvió a mi misma:Varias veces invité a mi marido a que lea las apasionadas entradas de Jusamawi, y hoy, justo hoy, lo leyó desde el trabajo. Acaba de llamarme preguntando si añoro a ese novio de los pelos largos, primera demostración de celos en un tiempo considerable.
Con más razón iré a la peluquería.
Querido J, Sr. Sartre, mis respetuosos agradecimientos.
Aquí hay una. Éste, en particular, me ha servido tanto, que es casi un premio mayor. Me reí a carcajadas por un largo, largo rato. Todavía me estoy riendo, así que gracias por darme la oportunidad de darte este acuse de recibo.
Espero que salgas de la peluquería como la catorceañera arrebatadora que seguramente has sido todo este tiempo. Y sobre las canitas esas, créeme que te entiendo profundamente, mucho más de lo que quisiera. Sin embargo, yo todavía no doy mi brazo a torcer respecto a los tintes…… Pero ya que vas para la peluquería, comparto contigo, en agradecimiento, un secreto que descubrí en pelo propio: el efecto rejuvenecedor de las melenas de los quince es inversamente proporcional a los años que marca el idiota del calendario. Al menos en mi caso, ha sido un proceso, y encuentro que cortándome el pelo un poco más cada vez, obtengo el efecto deseado… por algo Mia Farrow siempre pareció una niña! No olvides un pedicure como Dios manda, te sorprenderías de lo útiles que pueden ser. 😉
María eugenía,
Unamuno,Sartre, esencias y existencias.A menudo sucede que cuanto más lo embrollamos todo más nos alejamos de la comprensión. Hoy te ha bastado una cana para comprender toda la dimensión del tiempo. Lola te ha sido más útil que Jean Paul,la peluquería más reconfortante que la obra completa de Unamuno y tu novio de los catorce más provechoso que una romántica cena con velas y música de fondo.
De una u otra forma siempre está ahí el tiempo asomando su cabecita.
Felicidades a tu hija (¿Cuántos invitados había en su fiesta de cumpleaños?),saludos a Lola a ti y a tu marido.
M,
Según esa teoría podríamos considerar la longitud del pelo como la medida del tiempo.Será por eso que los hombres viven menos.
M, comparto plenamente tu teoría sobre la longitud del cabello, es casi como la de J y los labios finos, por ahora le estoy dando el gusto a mi marido de dejarlo largo, pero estoy en esa cuenta regresiva. (Igual a Mia Farrow no le fue muy bien después de todo)
Es maravilloso que puedas ver esas pequeñas ganancias de las grandes pérdidas. Gracias
J, ¿Cómo es que tenés una respuesta para cada uno de mis arrebatos? Me llevás a pensar que sos muy sabio o muy viejo, (refiriendome al tiempo pasional, claro, no?)
Dando por superada la prueba del cumple de Isabela, comienzo a prepararme para el de Lola en noviembre: M, J si gustan cruzar el charco, los esperamos, comida es lo que sobra.
Jusamawi De nada. Gracias. Es cierto, el élan vital siempre se abre paso al final. Podemos «desfragmentar» o mejor dicho «fragmentar» el tiempo «in vitro» a fin de comprenderlo y controlarlo hasta el punto en que queramos hacerlo, independientemente de que se pueda hacer o no en la realidad….( pensándolo, ¡es harto difícil fragmentar algo que no existe!) Y eso es lo que hace de algún modo el concepto de los Ciclos de Acción…. Es como con los mapas: NO SON el terreno, pero ayudan tremendamente a llegar al sitio. «Cuando intuimos que algo empieza y acaba estamos hablando de duración, no de tiempo.» Algo que empieza, cambia/dura/se desarrolla y acaba, en mi idioma es un Ciclo de Acción… o un «incidente» [je] ¿Cómo va a crear Jade el futuro si no entiende lo que es y lo que tiene que hacer?
Sobre el pelo, es al revés. Juventud visual=largo en una joven y corto en una vieja. En el caso de los hombres, mi humilde opinión es que se ven bien con él largo, muy largo, o inexistente. Prefiero los extremos. No me gustan los agentes del FBI. Creo también que para ellos aplica la regla femenina de juventud/vejez. Los hombres viven menos porque se dejan convencer de los médicos.
María Eugenia, Sí, y la de las manos pequeñas, como las mías, jajaja! Por experiencia, si te llevas de tu marido, NUNCA te vas a cortar el pelo. Si lo haces gradualmente, digamos en un plazo de uno o dos años, ni siquiera se va a dar cuenta, garantizado. Sabrá que algo cambió, pero no podrá decir qué. En serio! A Mia le fue mal porque…. bueeeeno, no es una buena idea criticar en este blog al causante de su desgracia…. Pero no tuvo nada que ver con su corte de pelo. Yo estoy de tu lado del charco, pero mucho más al norte. En todo caso ¡gracias por la invitación, particularmente por las empanaditas! Jusamawi es muy sabio y ha sido sometido a entrenamiento riguroso e intensivo en arrebatos, durante largo tiempo. Tiene calificación de Summa Cum Laude.
María eugenia,
M ha sido indiscreta pero, ya que lo ha dicho, tendré que admitirlo.
Soy, en verdad, experto en el tratamiento de arrebatos.No hay arrebato que se me resista.Tengo respuesta para todos.Puedes arrebatarte cuanto quieras.
Si es cuestión de edad o de sabiduría no está bien que yo lo diga.
Me apunto al cumpleaños de Lola. Eso sí, empezaré a hacer régimen desde ya.Visto el menú del último será lo más sabio.
M,
Los incidentes existen porque tienen principio y final.Duran lo que dura en llegar el final.No le expliques a Jade el futuro porque no existe.Si lo haces esperará que el futuro le resuelva los problemas y acabará por no hacer nada, creer en el destino y cosas peores.Las decisiones se toman, los problemas se resuelven siempre en tiempo presente.La vida es también siempre presente.
No hay nada más inútil que esperar que llegue el futuro.
pienso que el tiempo no pasa porque al ser infinito no podria llegar asta hoy. En rrealidad sufrimos cambios continuos una y otra vez ala vez que estamos aqui podemos estar en otro sitio podemos estar rrepetidos y lo mismo que pasa hoy pude pasar en otros lugares del universo no debemos preocuparnos por nada enfermedead dinero trabajo amores todo viene y ba sube ya baja porque en rrealidad simplemente estamos jusamawi tiene razon el tiempo no existe solo somos conscientes de que estamos pero no se puede razonar de que el tiempo pase
Hola Antonio,
El tiempo lo hemos inventado para situarnos. No es más que una convención.Nuestra conciencia se limita al presente.Somos, pero eso no nos basta.
Gracias por tu visita y comentario.